Como dueño de una mascota que interactúa con su perro todos los días, tiene la oportunidad de detectar problemas oculares antes de que se conviertan en problemas importantes. ¿Las buenas noticias? La mayoría de las afecciones oculares son tratables cuando se diagnostican a tiempo. La clave es estar atento, seguir los protocolos básicos de seguridad y saber cuándo es el momento de ver a su veterinario. Esto es lo que sabemos.
Un espectáculo para la vista
A diferencia de la increíble nariz y el sistema olfativo de tu perro, la forma en que funcionan sus ojos es bastante similar a la forma en que lo hacen los tuyos. Una clara diferencia es que los caninos tienen un tercer párpado ubicado en la esquina del ojo que actúa como una especie de limpiaparabrisas para la córnea. La glándula de este párpado produce una película lagrimal que no solo ayuda a mantener el ojo húmedo, sino que también actúa como un ganglio linfático y produce anticuerpos que protegen contra las infecciones. Y, como los humanos, el sentido de la vista de un perro puede cambiar con la edad o la enfermedad. Por ejemplo, su mascota puede desarrollar esclerosis nuclear o cataratas a medida que envejece. Las mascotas que desarrollan diabetes, presión arterial alta, algunos tipos de cáncer o enfermedades dentales también pueden experimentar cambios en la visión.
Qué buscar en casa
Usted es el mejor defensor de su perro para mantener una vista saludable. Tómese un momento cada semana para examinar sus ojos en busca de signos de problemas. Por ejemplo:
El enrojecimiento, la hinchazón, el exceso de secreción o los ojos llorosos pueden indicar el comienzo de una infección. El lagrimeo, el entrecerrar los ojos o el parpadeo excesivos pueden indicar una variedad de problemas, desde aquellos tan simples como las alergias estacionales y el ojo seco hasta afecciones más graves, como el glaucoma o un traumatismo ocular. Una turbidez excesiva, una neblina azulada o una secreción pueden indicar cataratas, esclerosis nuclear o glaucoma.
Si los ojos de su perro presentan alguno de estos síntomas, baje suavemente el párpado y verifique que no haya residuos. Si ve algo que necesita ser removido, enjuague el ojo con agua tibia o use un hisopo de algodón para sacarlo suavemente. Es hora de llamar al veterinario si tu perro se frota los ojos constantemente, parecen hinchados o sensibles a la luz, sospechas que puede tener una infección ocular o le han penetrado desechos en el ojo.
Prevención
Algunas razas son más susceptibles que otras a desarrollar problemas oculares. Las razas de cara chata, como los carlinos y los bulldogs, corren un mayor riesgo de sufrir enfermedades de la córnea, mientras que las razas de pelo largo, como los perros pastores y los caniches, corren un mayor riesgo de infecciones oculares. Afortunadamente, hay cosas simples que puede hacer para evitar problemas con los ojos de su perro, sin importar de qué raza sea. Por ejemplo:
No permita que su perro saque la cabeza por la ventana mientras el automóvil está en movimiento. Aunque a su nariz le encanta experimentar todos los olores, sus ojos corren el riesgo de desarrollar una irritación o infección debido al polvo y los escombros que soplan. Límpiele los ojos a diario con un paño suave y húmedo o una bola de algodón. Si sus ojos tienen costras debido a alergias, límpielos con firmeza pero con cuidado para aflojar la materia, repitiendo el proceso hasta que se haya eliminado. Mantenga el vello facial largo recortado para que no irrite los ojos. Pídele ayuda a un peluquero o, si eliges hacerlo tú mismo, recorta el pelo cuando tu perro esté tranquilo con unas tijeras de punta roma sostenida paralelamente al ojo. Programe exámenes de rutina con su veterinario. Junto con sus observaciones semanales, es la mejor defensa de su perro contra el desarrollo de enfermedades crónicas de cualquier tipo.
Ya sea persiguiendo su pelota favorita durante un juego de búsqueda, viendo a un conejito saltar por la ventana de la sala de estar o simplemente moviendo la cola al ver a su humano favorito, los ojos de su perro son fundamentales para ayudarlo a disfrutar plenamente del mundo que lo rodea. Y aunque no siempre puede evitar enfermedades o lesiones, tomarse unos minutos cada semana para examinar los ojos de su perro puede evitar dolor y sufrimiento innecesarios. Sus observaciones combinadas con la atención experta de su veterinario forman una asociación fundamental para mantener la salud y el bienestar general de su perro.
Recomendaciones de los editores
5 tendencias de mascotas para 2023 que nos alegra ver (y 1 que no) 5 cosas que los veterinarios desearían que hicieran los dueños de mascotas en 2023: puedes hacer todo esto por tu compañero peludo 3 beneficios científicos de ser una persona amante de los gatos: tú Nos sorprenderemos con lo que descubrimos. ¿Es una buena idea tener un cachorro para Navidad? No puedes devolverlos como un suéter 9 datos de Boston terrier que debes saber antes de traer uno a tu vida